Después de una mes ya noto que le voy cogiendo el tranquillo al coche. En trayectos mixtos por carreteras interurbanas de 80-90 le saco de 4 a 4.5. En autopista con control crucero y mucho trafico me sube a 4.9, lógico.
Me he pasado al modo Normal y es otro mundo. Tengo mejores sensaciones y me resulta mucho más fácil entrar en vela. En modo ECO me pasaba toda la recta de ciudad acelerando para llegar a 45 o 50. Ahora ya noto que controlo mejor la potencia para hacer lo que quiero.
Me habéis ayudado un montón. En ciudad hay muchos trayectos donde le saco el jugo, y no gasto toda la batería. Ya sé como coger rápido la velocidad, hacer vela, donde recuperar, etc. Estoy cada día mas encantado con el coche.
Cuando llevo a familiares y amigos siempre sale la misma conversación: "huy, aquí atrás no entramos bien los tres, que estrecho, y eso que parecía muy grande por fuera". Yo les contesto que es un coche juvenil, para el conductor y la pareja, el resto viene de propina, jeje.
Solo hay una par de cosas que no logro mejorar:
1) no creo que tenga solución, pero los primeros 5 minutos, mientras calienta el motor, noto que el comportamiento es mucho mas perezoso. Me da la sensación de estar en modo ECO, y veo que gasta un montón.
2) En algunos trayectos de ciudad tengo repechos importantes durante 400 o 500 metros. Es un sube y baja continuo. No se muy bien cual es la mejor manera de afrontarlos. El comportamiento normal sería dar gas de forma moderada y estable durante toda la subida, pero veo que el consumo sale de escala y termino los trayectos con 7 u 8 l/100Km. Si acelero mucho para que luego, en mitad de la subida, el eléctrico apoye y el de combustión y no necesite mucho gas, me baja enseguida de velocidad y no voy a gusto, le tengo que volver a pisar. ¿Como lo gestionáis? Me refiero a la segunda mitad de la subida.
Muchas gracias por los consejos. Un saludo.