Si queremos comprar unas llantas para nuestro coche, ya sea por ejemplo para montar unos neumáticos de invierno, o simplemente por razones estéticas, lo primero es conocer las dimensiones que debemos respetar. Esta cuestión se había planteado ya en un hilo anterior: Medidas completa de la llanta del chr.
La más crucial de esas dimensiones es el esquema de tornillos; en nuestro caso, 5x114,3. Las dimensiones externas de la llanta, es decir el diámetro y la anchura, determinarán qué neumáticos podemos montar. Muy importante es también el offset o desplazamiento (ET), que debemos mantener lo más cercano posible al de serie si no queremos modificar la geometría de suspensión.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, podremos elegir unas llantas que en teoría serán compatibles con nuestro coche. En la práctica, sin embargo, a veces se lleva uno la sorpresa de que el diseño interior en la zona de los radios hace que tropiecen con la pinza del freno. A la hora de encargar unas nuevas llantas, que además no suelen ser baratas, nunca está de más verificar previamente su compatibilidad con nuestro coche. Para ello se utiliza una plantilla de freno del estilo de la que podéis ver aquí: https://jeepey.com/media/workspace/files/BRAKE_TEMPLATE_drawing_1.pdf.
Esto se imprime en un papel al que se le pega un cartón por detrás para darle una cierta rigidez, y luego se recorta siguiendo el perímetro. La plantilla resultante nos indica los puntos extremos a los que llega la pinza: si la pasamos por el interior de una llanta y no toca (hay que dejar una tolerancia de dos o tres milímetros), es que nuestros frenos caben en esa llanta.
Si tuviera ya mi coche lo haría sin más, pero como todavía no lo he comprado os pido ayuda a vosotros. Cuando por el motivo que sea tengáis una rueda delantera desmontada, sacad por favor una foto del freno que nos permita reconstruir algo lo más parecido posible a esa plantilla. Habrá que sacar la foto desde una dirección que sea paralela a las caras del disco y perpendicular a su sección central, desde un ángulo que permita ver la mayor extensión frontal (no lateral) de la pinza. Vaya, como en el dibujo, que una imagen vale más que mil palabras. Luego habrá que hacerle otra foto al redondel del disco, perfectamente encarado, que nos servirá para establecer la escala basándonos en la única dimensión que conocemos con certeza: el diámetro de 298,5 mm. Ambas fotos habría que sacarlas desde una cierta distancia para minimizar el error de paralaje; como no necesitamos mucha resolución, aunque los frenos se vean pequeños en la imagen original siempre podemos encuadrar y agrandar la parte que nos interesa.
Publicad aquí las fotos y yo me comprometo a dibujar la plantilla basándome en ellas. El paso siguiente sería hacer una prueba (como en un traje a medida) con esa primera plantilla para comprobar si ajusta bien o si necesita algún retoque. Una vez tengamos la versión definitiva, la publicaremos indicando en varios idiomas de qué se trata, pues puede ser útil para todos aquellos que se planteen comprar unas llantas nuevas.
La más crucial de esas dimensiones es el esquema de tornillos; en nuestro caso, 5x114,3. Las dimensiones externas de la llanta, es decir el diámetro y la anchura, determinarán qué neumáticos podemos montar. Muy importante es también el offset o desplazamiento (ET), que debemos mantener lo más cercano posible al de serie si no queremos modificar la geometría de suspensión.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, podremos elegir unas llantas que en teoría serán compatibles con nuestro coche. En la práctica, sin embargo, a veces se lleva uno la sorpresa de que el diseño interior en la zona de los radios hace que tropiecen con la pinza del freno. A la hora de encargar unas nuevas llantas, que además no suelen ser baratas, nunca está de más verificar previamente su compatibilidad con nuestro coche. Para ello se utiliza una plantilla de freno del estilo de la que podéis ver aquí: https://jeepey.com/media/workspace/files/BRAKE_TEMPLATE_drawing_1.pdf.
Esto se imprime en un papel al que se le pega un cartón por detrás para darle una cierta rigidez, y luego se recorta siguiendo el perímetro. La plantilla resultante nos indica los puntos extremos a los que llega la pinza: si la pasamos por el interior de una llanta y no toca (hay que dejar una tolerancia de dos o tres milímetros), es que nuestros frenos caben en esa llanta.
Si tuviera ya mi coche lo haría sin más, pero como todavía no lo he comprado os pido ayuda a vosotros. Cuando por el motivo que sea tengáis una rueda delantera desmontada, sacad por favor una foto del freno que nos permita reconstruir algo lo más parecido posible a esa plantilla. Habrá que sacar la foto desde una dirección que sea paralela a las caras del disco y perpendicular a su sección central, desde un ángulo que permita ver la mayor extensión frontal (no lateral) de la pinza. Vaya, como en el dibujo, que una imagen vale más que mil palabras. Luego habrá que hacerle otra foto al redondel del disco, perfectamente encarado, que nos servirá para establecer la escala basándonos en la única dimensión que conocemos con certeza: el diámetro de 298,5 mm. Ambas fotos habría que sacarlas desde una cierta distancia para minimizar el error de paralaje; como no necesitamos mucha resolución, aunque los frenos se vean pequeños en la imagen original siempre podemos encuadrar y agrandar la parte que nos interesa.
Publicad aquí las fotos y yo me comprometo a dibujar la plantilla basándome en ellas. El paso siguiente sería hacer una prueba (como en un traje a medida) con esa primera plantilla para comprobar si ajusta bien o si necesita algún retoque. Una vez tengamos la versión definitiva, la publicaremos indicando en varios idiomas de qué se trata, pues puede ser útil para todos aquellos que se planteen comprar unas llantas nuevas.
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